CINECLUB | REBECA de Alfred Hitchcok
18 de junio de 2018 a las 18,30 horas. Acceso libre hasta completar aforo.
D. Yuri Aguilar, gerente en Aguilar Cinematografía. hará una charla introductoria en la que nos introducirá la película REBECA, que se proyectará en formato de 35 mm.
FICHA FILMAFFINITY
TÍTULO.- REBECA
TÍTULO ORIGINAL.- REBECCA
AÑO.- 1940
PAÍS.- ESTADOS UNIDOS
DIRECTOR.- ALFRED HITCHCOCK
GUIÓN.- Robert E. Sherwood & Joan Harrison (Novela: Daphne du Maurier)
MÚSICA.- Franz Waxman
FOTOGRAFÍA.- George Barnes (B&W)
REPARTO.- LAURENCE OLIVIER, JOAN FONTAINE, GEORGE SANDERS, JUDITH ANDERSON, NIGEL BRUCE, REGINALD DENNY, C. AUBREY SMITH, GLADYS COOPER
SINOPSIS.- Al poco tiempo de perder a su esposa Rebeca, el aristócrata inglés Maxim De Winter conoce en Montecarlo a una joven humilde, dama de compañía de una señora americana. De Winter y la joven se casan y se van a vivir a Inglaterra, a la mansión de Manderley, residencia habitual de Maxim. La nueva señora De Winter se da cuenta muy pronto de que todo allí está impregnado del recuerdo de Rebeca.
1940: 2 Oscars: Mejor película y fotografía. 11 nominaciones
Tuvo otras nueve candidaturas, incluyendo las de mejor director para Hitchcock, mejor actriz principal para Joan Fontaine, mejor actor principal para Olivier, y mejor actriz secundaria para Anderson.
También fue candidata al Oscar al mejor guion adaptado para Robert E. Sherwood y Joan Harrison, a la mejor dirección artística para Lyle R. Wheeler, al mejor montaje para Hal C. Kern, a los mejores efectos visuales para Jack Cosgrove y Arthur Johns, y a la mejor banda sonora para Franz Waxman.
«Anoche soñé que había vuelto a Manderley» («Last night I dreamt I went to Manderley again»)
Rebeca será la primera película que el famoso cineasta británico ruede en Estados Unidos, para llevar al cine la novela de Daphne du Maurier.
El señor de Winter, de viaje en Montecarlo, cuándo está como en una ensoñación, mirando por un escarpado terreno al mar, oye el grito de una joven, que teme que esté a punto de hacer una locura. Será su futura esposa y lo querrá nada mas verlo. Ella, cuyo nombre de pila no se pronunciará en toda la película, está acompañando a una americana. Cuándo van a abandonar el hotel, se produce el encuentro decisivo de ambos y Maxim le pide matrimonio. Vuelve a Manderley como señora de Winter, pero allí le espera la sombra de Rebeca en todos y cada uno de los rincones de la casa, por no decir en la señora Wanders, completamente enamorada de ella.
El manejo que hará esa despiadada mujer de la actual señora de Winters será total, aprovechando que se trata de una buena mujer. No la soporta, no supera que Maxim haya sustituido a su adorada Rebeca y le pondrá todos los obstáculos para hacerle pasar mal, incluso animándola al suicidio.
Papelones auténticos los de estos actores:
– Wanders con esa cara maléfica que mantendrá durante toda la película. El director aun conseguirá con sus juegos de luces y sus planos hacerla mas perversa.
– la señora de Winter, perfectamente llevada por Joan Fontaine, con esa dulzura, que puede hacerla muy inferior a lo que debería ser, casi servil, pero que se va creciendo conforme avanza la historia, llegando a ser el auténtico sostén de su marido. Dice en un momento dado: te casaste conmigo porque soy aburrida, torpe, sin experiencia, nadie murmuraría de mi… Su nivel de autoestima como vemos, cero.
– Maxim, llevado a la pantalla por el histriónico actor Laurence Olivier. En algún momento parece inexpresivo, como si aquello no fuera con él. Las caricias a su joven y reciente esposa son de una superficialidad que exaspera. También crece al final, pero, en mi opinión está muy frio, hasta en los grandes momentos como son cuándo su mujer llega vestida como un año antes lo había estado Rebeca. Parece el “menos presente“.
Fundamentalmente estos tres personajes, pero tienen una coral alrededor de importancia.
Y la cámara hace chirivitas y presenta planos espectaculares ( obtuvo Óscar a la fotografía y se entiende perfectamente). Consigue con ese ¿desea algo la señora?, una conmoción intensa: esas manos que corren las cortinas trasparentes de separación en la habitación de Rebeca y esa aparición de la siniestra mujer que segundos antes era una sombra negra . El enfoque constante de la R, en todas partes, almohadas, sobres, agendas, por toda la casa. Esos planos en la habitación de Rebeca con Wanders mostrando a la señora Winter la ropa de ésta: pasando las pieles por la cara de ambas, en un intento de mostrar la superioridad y elegancia de esa sombra que no veremos en ningún momento, pero que está presente. Y cuándo le pasa, de lejos, el cepillo de su adorada, con el que la peinaba. Mucho mas tarde, ese ambiente de niebla para hacer mas angustioso el naufragio y el descubrimiento de esa barca hundida…Cuando Maxim narra a su mujer qué le pasó en el pabellón con Rebeca, la cámara va “andando” literalmente, lleva a Rebeca desde el asiento hasta su destino en la habitación: está allí. La salida de la morgue de los cinco hombres, atribulados, con una cámara que desciende hasta los pies del grupo. Montones de escenas para describir, sin parar.
Y parece que Rebeca ha vencido: su sombra se ha interpuesto entre la pareja y los ha separado.
Según Wikipedia, el actor inglés Laurence Olivier trató horriblemente a Joan Fontaine durante el rodaje. Esto afectó a la actriz, y Hitchcock aprovechó para hacerle creer que todo el mundo del equipo de rodaje la odiaba, haciéndola más tímida y reservada, justo lo que quería el director para el personaje.
